martes, 24 de julio de 2012

Fátima Gálvez: "Tiraora" OLÍMPICA

Fátima Gálvez Marín está cumpliendo el sueño que, con tan sólo 9 años, se propuso alcanzar. Es nuestra representante en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, donde competirá por la medalla de oro en Tiro al Plato, modalidad Foso Olímpico.



Pero es que, además de campeona, es una excelente persona, guapa e inteligente, que ha conciliado las giras/campeonatos mundiales con los estudios de enfermería.



Tiene un empuje y una capacidad de sacrificio realmente dignos de admiración. ¡Qué pena que algunas instituciones no estén a su altura!. Su única meta es el número 1.



Y por si no lo había dicho antes, es mi paisana.



Fátima: Suerte, aunque no la necesitas; te deseamos que el día 4 de agosto La Fuerza te acompañe.
Recuerda que, pase lo que pase, ya estamos super orgullosos de tí.
Muchas gracias.

miércoles, 18 de julio de 2012

Toros en el campo de Aranjuez

Los defensores del toro de lidia últimamente están muy denostados.
Yo no quisiera que se extinguiesen los toros bravos. Además pienso que esta estampa no le desagradará a nadie.
Creo que el toro bravo, es un animal ágil, veloz, noble y magnífico.
No pretendo hacer ninguna reivindicación en ningún sentido, es sólo que los tengo cerca de mi casa y me emociono cuando los veo; además me ha permitido sacar a pasear al viejo Minolta 400/4.5 HS-APO G.



sábado, 14 de julio de 2012

Lamassu

Los Lamassus no son otra cosa que "colosales toros antropomorfos alados" que los asirios creían que habitaban en desiertos y montañas. Normalmente los empleaban como protectores y guardianes colocándolos pareados ante las puertas de los palacios.
Cuenta la leyenda que mataban a todo aquél que se aproximara, excepto a los hombres buenos o a los totalmente malvados. Desconozco en qué grupo me habrá clasificado a mí.

jueves, 5 de julio de 2012

Amor de abuela

Cuánta razón tenía Mary H. Waldrip cuando decía: "Los nietos son la recompensa de Dios por llegar a viejo".
Aquí os presento a la abuela de mi nieto que sostiene sus manos por un ratito, pero su corazón para siempre.