Si tuviese talento, hoy me gustaría versionar una alegoría del “Cambalache” que cantaba Carlos Gardel, porque recordando este viaje a Valencia siento que “El mundo fue y será un lugar para imaginar, en el quinientos seis y en el dos mil también...” Que no digo yo que Enrique Santos no tuviera razón, porque casi siempre sí que es una porquería, pero estando en La Ciudad de las Artes y las Ciencias percibes un lugar diferente, que te atrapa y te muestra lo que el mundo podría ser.
No hay comentarios:
Publicar un comentario